sábado, octubre 14, 2006

Charquen, charquen. Rico el charquen.

Dicen que las cosas más importantes en la vida llegan sin ser esperadas. Adoro esa idea, y vivir con ella en mente hace las cosas mucho más fáciles. Podrán ser grandes sorpresas, de esas que dan un vuelco en tu rumbo y determinan tu destino, o sorpresas sencillas y que luego se olvidan, pero que te dan un grato y dulce momento.

Por ejemplo lo que me pasó ayer. Ayer un señor me habló. Era un hombre de ochenta años y conversamos por más de una hora mientras viajábamos por Santiago en la micro. Me contó toda su vida, era piloto y conocía el mundo casi entero, se casó dos veces y hace un mes lo atropelló una bicicleta en Viña del Mar. Le gustaba trotar y nadar en el mar. Hablamos de amistades, amores, deseos y temores, y juntos nos reímos a carcajadas de lo curiosos que son los vendedores en las micros. Su nombre era don Roberto Valenzuela y era un caballero, un hombre ejemplar, culto, lúcido y de espíritu más joven que el mío. Un amante de la vida, un aventurero. Admiro profundamente a ese tipo de gente que podría morir satisfecha, sabiendo que lo hizo todo y que logró conquistar el mundo.

Tener una de las mejores conversaciones con un completo extraño y luego, con la misma facilidad con que todo empezó, decir adiós y no vernos nunca más. Nunca sabes lo que encontrarás en un extraño, es el gran azar lo que mueve las piezas. Espero que don Roberto siga siendo el mismo por los muchos años que yo sé le quedan por disfrutar.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajaja...
la llevan las crónicas callejeras
yo he conocio caleta de gente, hasta un perro

chao amigo.
sigue así

Anónimo dijo...

lo que no mata nos fortaleze dice el dicho, sin embargo lo que no te mata tb nos puede dejarte en un estado deplorable...solo el fuerte sale fortalecido...pero en cambio el debil sufre la herida por siempre....

my love cuando nos veremoooo??
puta la unica vez q te vi me caiste bakam....=) ojala nos veamo otra vez..!!! nos vemos

boys don't cry =)